Para la segunda entrega de nuestra serie sobre las historias detrás de los diseños de las cartas de adivinación de nuestros seguidores, hablamos con Jmatt para que nos cuente acerca de la amistosa rivalidad que culminó en su carta de adivinación: El tonto.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------



Déjenme comenzar diciendo que es genial ver que muchas cartas de adivinación creadas por la comunidad representan algo muy significativo y emotivo para los creadores de dichas cartas. Sin embargo, este caso no es así en absoluto.

Mi historia en Path of Exile comenzó cerca del final del alfa, en 2011. Después de obtener una beta en un sorteo del sitio principal, comencé a jugar con algunos amigos esporádicamente durante la Beta hasta que comenzamos a tomarnos el juego con más seriedad durante la liga Nemesis. Era la primera vez que jugaba un ARPG en modo hardcore, y había algo extrañamente adictivo en el hecho de perder a tu personaje una y otra vez mientras aprendes más sobre el juego lentamente del modo más brutal posible. Algo hizo un clic en ese momento, y terminamos dedicándole muchísimas horas a las ligas a partir de ese momento y a lo largo de los años.

Uno de mis amigos, llamémosle Tom, se tomó el juego muy en serio. Aunque jugábamos el juego de forma cooperativa, siempre encontraba la forma, así como quien no quiere la cosa, de volver el juego más competitivo. Terminamos compitiendo para alcanzar los niveles más altos, para completar mayores desafíos y para ver quién podía completar más contenido que los demás. Nunca hablábamos directamente sobre esta competición, pero estaba implícita en los comentarios con doble sentido y las sutiles fanfarronerías al terminar cada una de las ligas.

Aunque confiaba en que mis habilidades en Path of Exile eran superiores, necesitaba una forma de sacar ventaja frente a Tom para que esta locura pudiera terminar. Me decidí por lo más obvio que se me ocurrió: gastar dinero para crear una carta de adivinación que se riera de él.

El título de la carta es en honor a Tom, pues creo que captura perfectamente su personalidad. Creo que la mayoría de quienes lo conocen lo describirían de forma similar. El arte de la carta está basado en una foto real de él que yo envié. Aunque nunca tuve oportunidad de agradecerle a los artistas de GGG, hicieron un trabajo maravilloso al convertirla en arte para una carta de adivinación. El producto terminado me impresionó mucho.

La recompensa de la carta es una combinación de dos cosas. Por un lado, es un resto de otra idea que tuve anteriormente para una carta, en la que obtendrías una cantidad aleatoria de Orbes de azar (entre 1 y 40) al canjear la baraja, pero esa idea no era viable en ese momento. Elegí los Orbes de azar simplemente porque me gustan. A mí me gusta apostar. Por otro lado, no había otras cartas que dieran Orbes de azar en ese momento, así que pensé que sería bueno para el juego. Consideré seguir pensando en algún otro objeto que fuera mejor para la broma, pero quería que la carta de adivinación fuera útil a su modo.

El texto épico de la carta es autoreferencial, pues describe la caída de Tom al ser colocado en su propia carta de adivinación. La parte del “hombre más culto” es discutible, pero aparentemente Tom tiene un doctorado en la vida real. Honestamente, yo mismo dudo de su autenticidad.

Los detalles sobre quién terminó ganando más de las competencias que llevamos a cabo en Path of Exile durante los años son irrelevantes para esta historia. No pregunten más. Lo único que realmente importa es que yo tomé la delantera al colocarlo en una carta de adivinación vergonzosa. Valió cada centavo.

Dejando de lado nuestra amistosa competencia, Tom y yo seguimos jugando Path of Exile juntos ocasionalmente, y el año pasado volamos a Nueva Zelanda y exploramos ExileCon juntos. Probablemente los comentarios con doble sentido y las fanfarronerías sutiles sigan por muchos años más. Aunque la carta de adivinación haya sido parte de una broma, realmente disfruté mucho creándola junto a GGG, y fue muy divertido dejar mi pequeña marca en el juego.